La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 9 de agosto como el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, en el marco del decenio Internacional de las Poblaciones Indígenas del Mundo, el cual se llevó a cabo desde 1995 hasta 2004. El 9 de agosto simboliza el día en que Grupo de Trabajo sobre Poblaciones Indígenas de la Subcomisión de Prevención de Discriminaciones y Protección a las Minorías de las Naciones Unidas celebró su primera reunión en 1992.
Las Naciones Unidas buscan que esta conmemoración sea una oportunidad para preservar y vigorizar las culturas indígenas del mundo, incluyendo factores tan relevantes como el arte y la propiedad privada.
La pertinencia de esta conmemoración nace también de una realidad universal y es la especial afectación por fenómenos como la pobreza, la marginación, la exclusión, la carencia de oportunidades, el despojo de tierras, la vulneración de los derechos fundamentales y la pérdida de sus tradiciones culturales, entre otros.